10.7.05

Cereales en la ma�ana

Otra vez est� ahi, sentado solo en la cocina a las 6 de la ma�ana, mirando la nada, como acostumbra hacer. No se que le pasa, no puedo preguntarle, no puedo acercarme a �l y cumplir el rol que supuestamente tengo. Entonces me limito a bajar las escaleras, abrir la heladera y preparar los dos desayunos, antes de irme al colegio... Yo se que algo le pasa, pero no se qu�. Intento ayudarlo, pero me cuesta. El pap� lo mira y solo hace gestos con la cabeza, pensando quiz�s que el nene le sali� loco, pero nada m�s. Pero esto es de siempre, no es de ahora, yo lo conozco desde chico, y siempre fue asi, solo que ahora lo demuestra sin preocuparse. Lo miro y tiene el pelo todo revuelto, la mirada perdida en el plato, no se si no se acost� en toda la noche o si reci�n lleg�, pero tiene un olor a cigarrillo tremendo, que si el padre lo oliera, lo mata. Le pregunto si se siente bien, pero no me contesta, le digo que se vaya a ba�ar, y levanta los hombros. Sabe que ese gesto me desespera, entonces me enojo con �l y la que se va a ba�ar soy yo. �A veces puede ser tan est�pido!

3 comentarios:

/|- dijo...

Esto est� quedando maravilloso Pablo, felicitaciones. Es como las mejores mujeres: tierno pero depravado en el fondo.

Innoble. dijo...

Ale, es un gusto saber que mis mujeres se condicen tanto con tus mujeres. Deber�amos dejarlas en casa alguna vez y salir juntos, a tomar ese caf� porte�o-colombiano que ya nos debemos.

/|- dijo...

Sus deseos son �rdenes monse�or, ya encaden� a la m�a a la ducha... me avisa (y)